El Museo Histórico de Amsterdam

Al Museo Histórico de Amsterdam se pueden entrar por tres sitios distintos: Kalversatraat, 92, St. Luciensteeg, 27, y Nieuwezijds Voorbugwal, 357. Se encuentra a menos de diez minutos a pie de la Estación Central. Abre de lunes a viernes entre las 10.00 y las 17.00 horas y los sábados y los domingos entre las 11.00 y las 17.00 horas. La entrada general cuesta 6 euros; media tarifa para niños y descuento para estudiantes; y acceso gratuito con la I Amsterdam Card.

Está instalado desde 1975 en un bello conjunto de construcciones en ladrillo que en su día fueron un orfanato mixto, lo cual explica que haya dos patios. Si se entra por la Kalverstraat puede verse sobre la puerta un grupo de huérfanos en torno a un plato.

Este bello museo traza la historia de la ciudad desde su fundación hasta comienzos del siglo XX. A la entrada, se ofrece un folleto explicativo (2,30 euros) en el que se sitúan las diferentes salas en su contexto histórico. La lectura ayuda a comprender lo que se va viendo a lo largo del museo.

En total, son una veintena de salas; la mitad de ellas consagradas a los dos siglos más importantes (XVII y XVIII) durante los cuales la ciudad conoció un florecimiento asombroso. En la sala 4 sobresale un panel muy instructivo: el plano de Amsterdam en 1538, la época en  que la plaza Dom hacía de muele de descarga.

La sala 8 resalta la importancia del azúcar y el jabón en los intercambios comerciales. En la sala  10 se pueden hacer sonar las campanas de un carillón del siglo XVII, situado antaño en la Torre de la Moneda. Además, en la sala 11, hay un Rembrandt algo mórbido: La lección de anatomía del doctor Joan Deijman.

Por último, llama la atención la sala de los Regentes. Alberga cuadros del siglo XVIIcomo el de La Derrota de la flota española, de 1631. En lo alto, se alzan los escudos de armas y, en las paredes, retratos de consejos de los regentes.

Foto vía Sobre Holanda