A la hora de organizar nuestro viaje a la capital holandesa, conviene tomar nota de una serie de consejos. Así, podremos tener un estancia más cómoda y agradable en Amsterdam.
1º. Qué llevar:
Hay que prepararse para cualquier imprevisto climático y se recomienda llevar paraguas y jersey incluso en verano. El calzado cómodo es esencial para evitar el el excesivo cansancio en las distintas visitas. En pocos sitios se exige etiqueta (a excepción de los casinos), pero se recomienda ropa formal en los conciertos y en los hoteles y restaurantes elegantes.
2º. Documentación:
Los ciudadanos españoles, como miembros de la Unión Europea, sólo necesitan el carné de identidad para visitar los Países Bajos, aunque nunca está de más portar otro documento identificativo como el pasaporte o el carné de conducir.
3º. Dinero:
Por seguridad, conviene llevar tarjeta de débito o cheques de viaje. Hay que asegurarse que esta tarjeta de débito se acepta en Holanda. Algo de dinero en metálico también es necesario para pagar las necesidades inmediatas a la llegada.
4º. Conducción:
Si se piensa ir a Holanda en coche se debe llevar el permiso de conduci (modelo Unión Europea), el permiso de circulación del vehículo y la carta verde del seguro.
5º. Niños:
Si se viaja con bébes es mejor llevarlos en mochilas o capazos; las sillas son complicadas de manejar en las calles adoquinadas y casi imposible de meter en los tranvías y las barcas de los canales. Los niños son bienvenidos en casi todos los lugares, salvo en algunos restaurantes caros.
6º. Aduana:
Los ciudadanos mayores de 17 años de los países miembros de la Unión Europea pueden importar una cantidad ilimitada de objetos personales, menos tabaco y alcohol. Los límites son: 800 cigarrillos, 400 puritos, 200 puros, 1 kilogramo de tabaco, 10 litros de alcohol , 90 litros de vino y 110 litros de cerveza. Se pueden traer perros y gatos con un certificado antirrábico.
Foto vía Curiosidades en la red
