Las impresiones hogareñas forman parte de la vida diaria del ser humano. Cada día se imprimen muchas cosas, pero siempre en los dos planos de la hoja de papel. No obstante desde el nacimiento de las impresoras en 3D (tres dimensiones), la imaginación no tiene límites, y menos en este mundo tan moderno e innovador.
Pues bien, pestos a ajustar el presupuesto para construir un casa , hay quien sólo precisa una impresora y poco más. Eso sí, una máquina especial y en tres dimensiones. En Amsterdam ya sustituyen los ladrillos por una mezcla de plástico y fibra impresos.