Heineken, la cerveza más popular de Los Países Bajos, es la una de las visitas más recomendables que un turista puede completar realizar a lo largo de su estancia en Amsterdam. Se trata de visitar la fábrica-museo de Heineken que se encuentra en la calle Stadhouderskade 78, al este del centro de la capital holandesa.
Una vez allí, el visitante disfrutará con una amena excursión autoguiada que le sumergirá en el corazón de una marca que se ha erigido en la mayor exportadora de cerveza del planeta.. Además de amplia información sobre los orígenes y la diladatada historia de la empresa, así como de los ingredientes fundamental y todo el proceso de producción de la cerveza, los visitantes podrán realizar un entrenido “viaje en botella” donde seguir y vivir en vivo y en directo el proceso de producción de esta sabrosa bebida.
La visita a la fábrica de Heineken en la capital holandesa es parecida a la de la fábrica Guinness en Dublín (Irlanda), aunque la importncia histórica y social de la cerveza holandesa es inferior a su hermana irlandesa. No obstante, la excursión mantiene los mismos rituales como una cata de cerveza sagrada en el bar llamado “Hasta pronto” y la posibilidad de adquirir odo tipo de objetos y alguna que otra botella especial en su tienda de souvenirs.
La Heineken Experience está en pleno auge. No en vano, recibe alrededor de un millón de visitantes al año. Se ha convertido en unos de los principales hitos turísticos de la ciudad de los canales.
Se puede llegar a esa fábrica por varios medios de transporte. La Heineken Experience abre de martes a domingo desde las 10.00 a las 18.00 horas, cierra los lunes. La entrada vale 10 euros. El recorrido incluye tres degustaciones gratuitas y suele suele dura poco más de una hora.
Foto vía Sobre Amsterdam