El Magere Brug

magere brug

El Magere Brug  es un puente situado sobre el río Amstel, en el centro de Ámsterdam, a la altura de Kerkstraat (Church Street), entre los canales de Keizersgracht y Prinsengracht. La sección central del Magere Brug es un puente basculante de madera y pintado de blanco. Toda una maravilla.

Se trata de una reproducción fiel, realizada en 1934, del que aquí se construyó en 1691. Su nombre original era Kerkstraatbrug (el puente de la calle de la iglesia), pero al ser tan estecho ha pasado a ser conocido como magere brug, que significa puente delgado o puente estrecho, y eso que el actual es mucho más ancho que el original.

Está construido en madera pintada de blanco. Operativo gracias a su última renovación en 1969, su sistema de poleas funciona a la perfección e iza todavía el puente para dejar paso a los barcos que surcan el Amstel.

Hasta 1994 el sistema levadizo se activaba manualmente y dos vigilantes trabajaban a cada lado para mantener las compuertas en equilibrio haciendo gala de un auténtico ejercicio de sincronización muy admirado por los visitantes.

Sin embargo, la inspección de trabajo consideró que era una labor que entrañaba riesgos y que dejaba margen, a pesar de la pericia de los vigilantse, a la posibilidad de errores humanos. El puente se mecanizó completamente y ya sólo está permitido su uso para peatones y ciclistas. Eso sí, todavia se levanta varias veces al día.

Este puente es uno de lo más fotografiados por los turistas y, por la noche, su magnífica iluminación permite contemplarlo en todo su esplendor. No solo los turistas se han dejado seducir por él, también el director Guy Hamilton lo ha utilizado como decorado para su famosa película de James Bond «Diamantes para la eternidad». Un bello marco para cualquier filme.

Foto vía Absolut Amsterdam