Hortus Botanicus, un bello jardín

El Hortus Botanicus se encuentra en Plantage Middenlaan, 2. Abre de mayo a octubre, todos los días de 9.00 a 17.00, salvo los fines de semana y festivos que cierra a las 22.00 horas y en julio y agosto a las 21.00 horas. En el resto del año, abre de 9.00 a 14.00, excepto los fines de semana hasta las 22.00 horas.

La calma de este jardín, unida a su intenso y agradable aroma, es ideal para abstraerse de la ciudad, aunque para aquellos que esperen una explosión de colores es más recomendable la excursión a los campos de tulipanes.

Es complicado encontrar la entrada al jardín, ya que se esconde tras uan verja en la esquina de Plantage Middeniaan y Dr. D.M. Sluyspad, frente a Herengracht. Los fines de semana de verano hay una gran afluencia. Está más tranquilo por las mañanas, sin embargo, en los calurosos días de verano, las plantas no atraviesan su mejor momento.

En 1638, el jardín botánico de la ciudad comenzo siendo una colección de hierbas medicinales, el Hortus Medicus, con propósitos farmaceúticos, hasta que en 1682 se trasladó hasta su ubicación actual. Las nuevas especies de flora que la Compañía Holandesa de las Indias Orientales traía de sus expecidiones por todo el mundo propiciaron su rápida expansión.

La colección queda dividida en un jardín exterior, donde  crecen las plantas árticas y o de clima templado, ya una serie de invernaderos. Hay una reconstrucción del propio Hortus Medicus original, en el que se incluyen todas las plantas inscritas en el catálogo del primer jardín, realizado en 1646. 

A continúación, están la sala del desierto de California/México, un invernadero de orquídeas y una casa de mariposas. Luego, se llega a la sala de las palmeras, una amplia y adornada estructura del siglo XIX.

En el otro extremo, el invernadero de los tres climas constituye una adición de finales del siglo XX, construido de forma experta para permitir a los visitantes experimentar las distintas zonas climáticas (tropicales, subtropicales y desérticas) gracis a un sendero secuencial.

Por último, para escapar del calor de los invernaderos se recomenda acudir al Orangery, hoy en día convertido en un café.

Foto vía Tillandsias